En el verdadero amor según la teoría de Sternberg tiene que haber intimidad, pasión y compromiso, es decir tiene que haber afecto, conexión, excitación, deseo y estar dispuesto a ayudar y darlo todo en los malos momentos.
Si uno de esos tres pilares fallan entramos en formas patológicas de parejas como vamos a hablar en este caso del encaprichamiento.
El encaprichamiento o encoñamiento , aunque su nombre correcto sería «infatuación», solo está basado en la pasión, una relación muy intensa, no se conocen realmente, solo hay buen sexo, y esto nos puede obnubilar y confundir hasta el punto de llegar a un estado de confusión que podemos incluso dejar de cumplir nuestras obligaciones.
Características de un encaprichamiento:
En esta relación no existe el sacrificio por parte de la otra persona, es una relación tóxica asimétrica, solo uno de los dos es el que ayuda, el que compromete su tiempo, y sus esfuerzos para hacerle favores al otro-a que al mismo tiempo solo está dispuesto-a a recibir y no dar. Es decir se desestabiliza la balanza entre el dar y recibir, uno de los pilares básicos a respetar en una relación de pareja.
La atracción solo está basada en el físico, en la carga erótica.
Idealizamos a esa persona, pero en el fondo no la conocemos. Y vemos en ella lo que queremos ver, lo que nos conviene ver, porque es mejor ignorar la realidad de la situación.
Sientes mucha necesidad de esa persona, deseas tener relaciones sexuales muy frecuente, hasta el punto que sufres ansiedad. Es un amor irracional.
Toñi Puertas.
